domingo, 20 de mayo de 2012

AL OTRO LADO DE LA MONTAÑA

Cuando inicié este blog, hace unos tres años, lo hice con la idea de hablar de literatura y de publicar de vez en cuando mis escritos viejos. Pero mi intención no era la auto-promoción. Entré en la web como una gran novata y con la ilusión de ser leída. En el camino entendí que tenía que trabajar muy duro, pues había caído en un mundo inmenso y complejo. Mi blog no era más que un grano de arena en el desierto. Poco a poco empecé a relacionarme con quienes tenían los mismos intereses que yo: La literatura. Encontré (aun hoy) mucho ego, indiferencia, orgullo, arrogancia, sencillez, calidez, sinceridad, aceptación, rechazo, falsedad, en fin, igual que en el mundo real. En esta experiencia he conocido algunos escritores tanto noveles como veteranos y con los que he mantenido una linda relación hasta hoy, algunos siguen siendo virtuales pero otros han dejado de serlo, pues salieron de la pantalla y se hicieron de carne y hueso... Sí, así mismo, como en una película de ciencia ficción!

Como dije al incio, mi intención con este blog no era la de auto promocionarme, sin embargo, con el giro que ha dado en los últimos meses el oficio de escritor, en la que se ha agregado al talento y a la inspiración, el oficio de vendedor, un novel o novato que quiera ser leído tiene obligatoriomente que lanzarle a la red y el blog de un autor desconocido es su principal canal de promoción. Es una herramienta que inevitablemente hay que utilizar para apostar por nuestros libros.

Pero no es de mi gran aventura en la web que quiero hablar. Hoy quiero hablar de mi último trabajo, paradójicamente mi primera novela. Como intento de escritora hace muchos años que la escribí, pero doce años después, esta novela en sí tiene su propia historia.  Incluso debo decir que desde entonces mi estilo ya no es el mismo. Está desarrollada en ese Pueblo de Pescadores que se quemó hace unos días y al que le dediqué la entrada anterior. Hace años que reposa en la Editora Nacional con la promesa de ser publicada. Sin embargo, la promesa no deja de ser promesa y mi obra sigue allí, esperando a que se abra una brecha entre los nombres conocidos y muy repetidos de autores dominicanos que hacen un anillo a esa entidad. Ahora Editorial Santuario trabaja con ella y aunque no tengo la fecha precisa, su publicación en papel sale para este año. Mientras tanto me he atrevido a dar el paso que no quería dar con ella y la colgué en Amazon. Para que empiece sus propias andanzas, para sacarle el polvo, para que vea la luz. Sus personajes lo merecen. Espero que se animen a descargar Al otro lado de montaña pinchando aqui. Valoraré grandemente tus comentarios.

lunes, 7 de mayo de 2012

Desaparece Pueblo de los Pescadores, Patrimonio cultural de Las Terrenas

Hoy el pueblo de Las Terrenas se ha despertado con una noticia difícil de digerir: La desaparición completa del Pueblo de Pescadores a raíz de un incendio que devoró unos catorce negocios que operaban en las legendarias casitas de madera llenas de color.

Allí frente al mar, en una hermosa bahía bordeada de cocoteros, que en las noches se llenaban de brillo, operaban varios restaurantes, algunos bares y una discoteca. Un lugar lleno de encanto, de magia y sabor, que no dejaba indiferente a nadie que haya visitado Las Terrenas. Con este siniestro, no solo han desaparecido los negocios con sus cuantiosas inversiones, en su mayoría de europeos, también desaparecieron decenas de empleos, muchos sueños y también el alma del pueblo.

La tristeza inunda las calles y la playa, hay lágrimas incontenibles, manos vacías, desamparo, cenizas, desesperación, e incertidumbre. La convicción de haberlo perdido todo de un porrazo.

En medio de la creciente desolación, diferentes voces y los indicios hablan de que este hecho no fue fortuito. A través de varios años el pueblo de pescadores ha resistido las envestidas de funcionarios que amenazaban con destruirlo por diversas razones, entre ellas fuertes intereses económicos de los que se habla a sota voz.